viernes, 24 de mayo de 2019

En este lugar.


Vi el sufrimiento de los que están en sus casas, de los que viven.
Entonces, reflexioné sobre mi estancia en el lugar.

¿Actué correctamente?  ¿Aprendí de mis errores?

¿Me esforcé para ser una mejor persona, menos egoísta y más compasivo, menos ruin y más bondadoso?

¿Hice de la moral mi virtud?  ¿Tuve el valor suficiente para ser honesto?

¿Practiqué la paz y la tolerancia?  ¿Actué conforme a la fraternidad y el amor?

¿Comprendí el significado de la libertad y de lo que es ser libre?

Es difícil estar acá, siempre lo ha sido, lo fue y lo será.

Pido perdón a todos y a por aquello que sea necesario,
el arrepentimiento es real.

La redención por la transgresión viene en un radiante rayo de luz.

Me siento agradecido, te doy las gracias.

Y, cuando llegue el día de salir de la casa será porque cumplí con lo debido,
me iré del lugar siguiendo al rayo de luz.

Luego, como sucede con todos los que viven, volveré al lugar,
a una casa nueva y cada vez mejor.

Pececitos